
Ksar Bou Taghat |
El ksar
El modelo arquitectónico más extendido en el valle del Todra es el ksar,
llamado en bereber "ighrem". Se trata de un pueblo rodeado por una muralla con torres de vigilancia, una o más entradas
monumentales y, en el interior, algunos equipamientos comunitarios entre los que se incluye siempre una mezquita.
|

Kasba de Ali Dani en Aït Zilal |
La kasba
El otro modelo es la casba o kasba, nombre que se ha comenzado a utilizar bajo el
protectorado francés para traducir la palabra bereber "tighremt" diminutivo de ighrem.
En efecto, se trata de una fortificación mucho más reducida; un solo edificio destinado a residir en él una familia
poderosa. Su planta es cuadrada o rectangular, con cuatro torres en los ángulos y, a veces, un patio interior.
|

Morabito en Haloul |
El morabito
Fuera del ksar, por lo general en su cementerio, encontramos siempre
uno o varios morabitos que cubren las tumbas de maestros sufíes o de otros individuos considerados santos por la comunidad.
Se considera que estos morabitos protegen el pueblo y por ello son objeto de visitas piadosas, especialmente de parte de las
mujeres. Su forma puede ser muy variada, pero se caracterizan todos por su cúpula central.
|

Torre de vigilancia cerca de Tadafalt |
La torre de vigilancia
En los puntos elevados próximos al valle, un elevado número de torres de vigilancia
permitían en otro tiempo detectar la presencia de enemigos a larga distancia. En la actualidad han desaparecido casi todas
y la única que vemos, cerca de Tadafalt, se halla en ruinas.
|

Construcción de tapial |
El tapial
El sistema de todos los modelos arquitectónicos descritos es el tapial, que consiste en
llenar un encofrado de madera con tierra ligeramente húmeda, sin paja, y apisonarla hasta darle consistencia. Una vez
concluida una tapiada, el encofrado se retira en seguida y los palos que lo sostenían dejan esos agujeros característicos
de los edificios de tapial, aunque también pueden taponarse mediante barro.
|

Fabricación de adobes |
Los adobes
El otro sistema de construcción tradicional son los ladrillos hechos de barro y paja y
secados al sol, llamados "adobes". Con estos ladrillos, unidos entre sí mediante la misma mezcla de fango y paja,
se construyen las paredes más ligeras del segundo o tercer piso, los tabiques, los pilares, las arcadas y la decoración.
|

Entrada del ksar Taghzoute |
La decoración
El aparejado de adobes permite crear numerosas figuras geométricas en los puntos más
altos de las paredes y de los torreones, así como en los dinteles sobre las puertas de los ksur y da las casbas.
Aparte de esto, los muros están rematados con almenas triangulares y las ventanas, muy reducidas, se rodean con un marco
de cal o de yeso.
|

Techo de una casa en Taghia |
Los techos
En el valle del Todra, los techos se ejecutan con cañas sobre vigas de palmera, de
álamo o de taray. Estas cañas, sustituidas algunas veces por tallos de adelfa, pueden componer dibujos geométricos.
Encima de las cañas se ponía una estera de hojas de palmera trenzadas o bien ropa vieja, si bien hoy se prefiere el
plástico, y el conjunto se cubre con una capa de tierra de casi 20 centímetros.
|

Revestimiento con tierra y paja |
El revestimiento
Las paredes y las cubiertas se recubren tanto en el exterior como en el interior
con la misma mezcla de barro y paja, que puede resistir dos décadas en el primer caso pero que debe
renovarse casi todos los años en las azoteas. A principios del siglo XX también se empezó a utilizar el
yeso, pero sólo en los cuartos de huéspedes de las viviendas y en la sala de oración de las mezquitas.
|

Edificio moderno en Tinghir |
Los edificios modernos
Hoy casi toda esta arquitectura tradicional ha sido sustituida por un estilo nuevo,
con edificios de hormigón armado y con influencias híbridas. De Europa toma la forma exterior, de las ciudades
marroquíes la distribución interior del espacio y recuerda la tradición local en la decoración que se hace
sobre las ventanas en forma de almenas triangulares.
|

Kasba asfixiada por el hormigón |
La conservación del patrimonio
El resultado de estos cambios es, por un lado, el abandono de los antiguos
ksur y casbas, que se derrumban por falta de mantenimiento, y por otro la construcción con cemento en el interior de los pocos
ksur que no han sido abandonados. En todo el valle del Todra, los únicos edificios de tierra que han sido
restaurados hasta el momento son la kasba del Chikh Bassou, la mezquita Ikelane de Afanour y algunas viviendas del
ksar Tinghir.
|